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El mundo del fútbol despide a dos de sus más grandes arqueros: Wojciech Szczesny y Claudio Bravo. Ambos jugadores anunciaron su retiro del fútbol profesional, dejando un legado plagado por décadas de éxitos y momentos inolvidables en el campo. Szczesny, quien recién había salido de la Juventus, reveló que, aunque su cuerpo estaba preparado para continuar, su corazón ya no lo estaba, y era momento de dedicar su tiempo a la familia.

Wojciech Szczesny, quien comenzó su carrera en el Legia de Varsovia y alcanzó la gloria en equipos como Arsenal y Juventus, logró un total de 252 partidos con la camiseta bianconera, donde ganó tres títulos de la Serie A, tres Copas de Italia y una Supercopa. A lo largo de su carrera, Szczesny se destacó por su firmeza bajo los tres palos, su habilidad para suceder a grandes figuras como Gianluigi Buffon, y su capacidad para mantener un alto nivel competitivo en las ligas más exigentes de Europa.

Por otro lado, Claudio Bravo, uno de los porteros más exitosos de la historia de Chile, también decidió colgar los guantes a los 41 años. Su carrera comenzó en Colo Colo en 2003, pero su salto al estrellato llegó en Europa, donde defendió los colores de la Real Sociedad, FC Barcelona y Manchester City. Bravo se convirtió en un referente del fútbol mundial, ganando la Champions League con el Barcelona en 2015 y estableciendo un récord de imbatibilidad en La Liga con 755 minutos sin recibir gol. Además, fue pieza clave en la ‘Generación dorada’ de la selección chilena, liderando a su país en la obtención de dos Copas América.

El retiro de Szczesny y Bravo marca el fin de una era para dos de los arqueros más destacados de las últimas décadas. Ambos dejan tras de sí una profunda huella en la historia del fútbol, no solo por sus logros en los clubes donde jugaron, sino también por su papel fundamental en las selecciones nacionales de Polonia y Chile.