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El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, y la primera dama Melania, recorrieron una de las zonas devastadas por el incendio de Palisades, al noroeste de Los Ángeles, California, y hablaron con residentes y bomberos sobre sus experiencias.

El gobernador Gavin Newsom agradeció al mandatario por recorrer una de las zonas devastadas.

El encuentro marcó la primera interacción cara a cara que Newsom y Trump han tenido desde que Trump asumió como presidente el lunes, y luego de que el presidente estadounidense ha criticado la respuesta del gobierno local ante el desastre.

Sin embargo, aseguró que quiere solucionar el problema: «Es como si te hubiera caído una bomba».

Haciendo referencia a algunas de las culpas que atribuyó a Newsom y otros demócratas de California por no estar preparados adecuadamente para manejar los incendios, agregó: «Lo solucionaremos de forma permanente para que no vuelva a suceder».

Más tarde Donald Trump confrontó a la alcaldesa de Los Ángeles, Karen Bass, en una conferencia de prensa transmitida por televisión nacional, acusándola de mentir sobre la respuesta a los devastadores incendios en Pacific Palisades, California. 

Trump exigió además que se permita a los residentes comenzar a limpiar sus terrenos de inmediato: «Deberían poder comenzar a limpiar sus tierras esta noche». 

La alcaldesa Bass inicialmente estuvo de acuerdo, respondiendo con un «sí»; sin embargo, Trump la criticó, afirmando que su declaración era falsa, ya que las víctimas aún tienen prohibido acceder a sus propias propiedades.