El presidente Donald Trump entregó este martes, de manera póstuma, la Medalla Presidencial de la Libertad al activista conservador Charlie Kirk, asesinado el mes pasado durante un acto en la Utah Valley University.
La ceremonia, realizada en el Jardín de las Rosas de la Casa Blanca en el que habría sido el 32º cumpleaños de Kirk, contó con la presencia de su viuda, Erika Kirk, quien recibió la distinción en su nombre.
Trump describió al fundador de Turning Point USA como “un gran héroe estadounidense” y destacó su influencia en una nueva generación de jóvenes conservadores. El mandatario también recordó su participación en el funeral del activista, a quien calificó como “mártir por la libertad”.
Creada en 1963, la Medalla Presidencial de la Libertad reconoce contribuciones destacadas a la nación estadounidense. Kirk es el primer galardonado de manera póstuma en el segundo mandato de Trump, sumándose a figuras como Tiger Woods, Arthur Laffer, Mariano Rivera y Elvis Presley.
