El presidente Donald Trump declaró el estado de desastre mayor en el condado de Kerr, en Texas, tras la tremenda inundación que ha cobrado la vida de decenas de personas. Al menos 15 de los muertos confirmados son niños, según autoridades locales.
«Acabo de firmar la Declaración de Desastre Mayor para el condado de Kerr, en Texas, para garantizar que nuestros valientes servicios de emergencia tengan de inmediato los recursos que necesiten», anunció en su cuenta de Truth Social.
Destacó que su administración continúa en coordinación con autoridades estatales y locales para enfrentar la emergencia.
«Estas familias están sufriendo una tragedia inimaginable, con muchas vidas perdidas y muchos aún desaparecidos. La administración Trump continúa trabajando estrechamente con los líderes estatales y locales», reiteró.
En ese sentido, mencionó que la secretaria de Seguridad Nacional, Kristi Noem, visitó la zona afectada junto al gobernador de Texas, Greg Abbott.
Se teme que el número de muertos aumente, mientras equipos de rescate buscan a 27 niñas desaparecidas de un campamento cercano al río Guadalupe, que se desbordó tras las lluvias torrenciales del viernes 4 de julio, cuando festejaban el Día de la Independencia de Estados Unidos.