Un sismo de magnitud 4.9 golpeó la provincia de Nangarhar, en el este de Afganistán, dejando al menos 15 heridos y destruyendo varias viviendas en el distrito de Dar-e-Noor, según autoridades locales.
El epicentro se ubicó a 23 km al este de Jalalabad, con 10 km de profundidad. El temblor se sintió incluso en la capital, Kabul.
El movimiento ocurre apenas tres semanas después del devastador terremoto de agosto, en la provincia oriental de Kunar. Aquel evento telúrico dejó más de 2 mil 200 muertos, tres mil 640 heridos y provocó la destrucción de miles de viviendas en la región oriental.
La ONU ha advertido sobre la urgente necesidad de asistencia humanitaria antes del invierno.
Afganistán es altamente vulnerable a sismos debido a su ubicación geológica y a la precariedad de sus infraestructuras. Este panorama provoca que incluso temblores moderados generen daños significativos en un país ya afectado por múltiples crisis.