El gobierno de Donald Trump instó a la Corte Suprema a bloquear una orden judicial que le exige devolver al país a Kilmar Abrego García, un residente de Maryland deportado por error a El Salvador.
Por su parte, el Departamento de Justicia alegó en una presentación de emergencia que la jueza de distrito Paula Xinis se extralimitó en su autoridad al ordenar el regreso de Abrego García para la medianoche de este lunes 7 de abril.
De esta forma, la Corte Suprema suspendió temporalmente el plazo impuesto por el tribunal para la repatriación, accediendo a la solicitud del presidente Trump de dar a ambas partes más tiempo para presentar sus argumentos.
El presidente del Tribunal Supremo, John Roberts, concedió la suspensión administrativa por iniciativa propia, lo que extenderá el plazo hasta que la corte emita una decisión más contundente, probablemente en unos días.
Ábrego García, salvadoreño de 29 años con antecedentes penales limpios, trabajaba legalmente como aprendiz de chapista en Estados Unidos gracias a la autorización de migración.
Casado con una ciudadana estadounidense, su vida en Maryland se vio repentinamente alterada cuando los agentes de inmigración lo detuvieron.
Fue deportado a una megaprisión de El Salvador el mes pasado, bajo el argumento de ser un presunto miembro de la banda MS-13.
La Casa Blanca se ha mantenido firme en su decisión de deportarlo, tras un informe de “The Atlantic” en el que se afirmaba que los abogados federales habían cometido un «error administrativo» al llevarlo a la prisión CECOT de El Salvador.