La compañía SpaceX canceló el octavo vuelo de prueba del Starship por problemas técnicos, luego del incidente con el anterior, cuando la segunda fase de la nave estalló, dejando una lluvia de restos en diversas zonas del Caribe.
El lanzamiento, que se haría desde la base de SpaceX en Boca Chica, en el sur de Texas, en la frontera con México, se detuvo dos veces durante el conteo para finalmente ser cancelado.
«Tienen (el equipo) un par de pasos más que pueden seguir para solucionar el problema. Si logramos superarlos, podemos comenzar la cuenta regresiva nuevamente», dijeron los anfitriones, que segundos después informaron la cancelación del vuelo.
El lanzamiento tenía el visto bueno de la Administración Federal de Aviación (FAA, por sus siglas en inglés), para que SpaceX del magnate Elon Musk continuara con los vuelos de prueba, mientras sigue la investigación sobre el accidente, que ocurrió luego de que la nave se separara del cohete Super Heavy que la llevó al espacio.
El Starship quiere convertirse en el primer servicio privado que llegue a la Luna y Marte y establezca presencias permanentes y colonias allí, una visión considerada viable por Musk.
De lograr las certificaciones de la NASA, Starship formará parte de la misión Artemis III, la primera en más de medio siglo que devolverá una tripulación a la superficie lunar y que está prevista para 2027.