México pondrá en marcha en enero de 2026 el nuevo Centro Mexicano de Supercómputo, una nueva infraestructura científica que operará en colaboración con el Centro de Supercómputo de Barcelona (BSC) uno de los más avanzados del mundo.
De acuerdo la presidenta Claudia Sheinbaum, el anuncio formal se realizará la próxima semana e incluirá la presentación de la supercomputadora más grande de América Latina, como parte del llamado Plan México.
El proyecto arrancará utilizando infraestructura proporcionada por el BSC, incluido el ecosistema tecnológico asociado a la supercomputadora MareNostrum 5, capaz de alcanzar 314 PFlops de potencia teórica y 248 petabytes de almacenamiento.
El acuerdo garantiza que el procesamiento y resguardo de datos permanecerá bajo control soberano mexicano.
Durante 2024, el BSC participó en más de 440 proyectos científicos con mil 226 investigadores, en áreas como desarrollo de chips, gemelos digitales, clima extremo, biomedicina y agricultura de precisión, experiencia que servirá de base para la cooperación con México.
El Centro Mexicano de Supercómputo iniciará operaciones inmediatas mediante un programa de formación de talento y estancias académicas, el plan contempla la capacitación conjunta con el IPN y el TecNM para 100 estudiantes de física, matemáticas e ingeniería, así como estancias de dos meses para investigadores del CINVESTAV. Además 177 especialistas mexicanos comenzarán actividades en Barcelona como parte de la unidad de análisis encargada del arranque operativo.
Entre los primeros proyectos destacan el desarrollo de modelos climáticos para prevención de desastres, análisis masivo de información aduanera para definir modelos de riesgo y combatir la corrupción, procesamiento de imágenes para mejorar la agricultura y la creación de modelos de lenguaje con inteligencia artificial para asistencia virtual.
Estos esfuerzos se integrarán con el sistema nacional de alertamiento y movilizarán a instituciones como el SMN, la CNPC, SECIHTI y ATDT.
