El secretario de Comercio de Estados Unidos, Howard Lutnick, advirtió que nada detendrá la ampliación de los aranceles de 25% al acero y el aluminio, hasta que se fortalezca la producción estadounidense.
Incluso dejó abierta la puerta para que el gobierno de Donald Trump añada el cobre a las protecciones comerciales. «No podemos estar en guerra y depender sólo del acero y el aluminio de otro país. No es razonable», dijo Lutnick.
En entrevista con CNBC adelantó que en una reunión que tiene prevista con el primer ministro de Ontario, Doug Ford, buscará «bajar la temperatura» entre Estados Unidos y Canadá, pero que esperará a que Mark Carney asuma como primer ministro canadiense para negociar sobre comercio.
«El presidente quiere que el acero y el aluminio se produzcan en Estados Unidos, y permítanme ser claro: nada lo impedirá hasta que tengamos una gran capacidad nacional de producción de acero y aluminio. Y por cierto, también va a añadir cobre a esa mezcla», sostuvo.
A finales de febrero, Trump ordenó a Lutnick una investigación de seguridad nacional de la Sección 232 para determinar si imponía aranceles a las importaciones de cobre, utilizando la misma ley que respaldó los aranceles al acero y al aluminio.