Ataques combinados con drones y misiles rusos causaron la muerte de al menos cuatro personas y una veintena de heridos la madrugada del viernes 6 de junio en la capital de Ucrania.
«Kiev sufrió otro ataque con vehículos aéreos no tripulados y misiles balísticos. Los rescatistas están respondiendo a las consecuencias en varios lugares de la ciudad,» escribió el Servicio Estatal de Emergencias ucraniano en Telegram.
El alcalde Vitali Klitschko informó que los bombardeos causaron estragos en las vías del metro de la ciudad, según autoridades civiles y militares.
La compañía ferroviaria nacional confirmó daños en rieles, lo que afecta el tráfico de trenes que sirven a la periferia sur de Kiev.
En la región de Ternópil hubo numerosos impactos durante el ataque, el más agresivo sobre esta provincia durante la guerra.
Además, otro ataque con misiles de crucero dejó cinco heridos, daños en infraestructuras industriales y afectaciones en el suministro eléctrico en la ciudad de Ternópil.
Mientras en Volinia cinco personas resultaron heridas y un edificio residencial de varias plantas sufrió daños severos.