Renata Zarazúa ha coronado un 2025 de ensueño. La tenista, que ya había sido protagonista de una de las mayores sorpresas del año al vencer a la número 6 del mundo, Madison Keys, en el US Open, demostró que su gran nivel no es casualidad. Su reciente actuación en el WTA 125 de Austin es la prueba de su consolidación en la élite.
Este domingo, la mexicana se enfrentó a la canadiense Marina Stakusic en la final de Austin. Zarazúa exhibió un juego lleno de determinación e inteligencia táctica, logrando darle la vuelta al marcador tras un inicio adverso. Los parciales de 4-6, 6-3 y 6-3 certificaron su triunfo en un encuentro que exigió su mejor versión.
El trofeo levantado en Texas representa el cuarto título WTA 125 en la carrera de la joven promesa, un logro que le ha valido el reconocimiento de la afición. Cada victoria suma al ímpetu de la mexicana, quien ha logrado brillar consistentemente en la temporada.
Gracias a este campeonato, la tenista azteca dará un salto significativo en el ranking mundial de la WTA. Con su nuevo ascenso, Zarazúa se posicionará en el puesto 70 del mundo, la mejor clasificación que ha alcanzado a lo largo de su trayectoria. Es el nuevo rostro del tenis en México.
Con el impulso de su más reciente éxito, la agenda de Renata Zarazúa ya mira hacia su país. La campeona viajará a México para encarar la Copa Billie Jean King en Monterrey. Este torneo será una gran oportunidad para conectar con sus seguidores y mantener la racha ganadora.

















