El Instituto para la Competitividad (IMCO) recomendó a la próxima administración del gobierno federal ampliar el suministro de gas natural en el sur-sureste de México.
Indicó que a diferencia del norte y Bajío, esta región no ha logrado transitar la ruta de la modernización económica e integrarse a la cadena de producción de América del Norte.
Lo anterior, añadió se debe a múltiples factores, uno de ellos, la falta de infraestructura energética en la región.
“Esto tiene implicaciones negativas tanto para los hogares, que tienen los mayores niveles de pobreza energética a nivel nacional como para las industrias que no se pueden instalar en la región debido a la falta de acceso a energía competitiva.
“Mejorar las condiciones de vida de los hogares del sur-sureste mexicano y hacer la región más atractiva para los inversionistas es una tarea apremiante para aprovechar las oportunidades de industrialización que ofrece la relocalización de las cadenas de valor”, enfatizó.
El IMCO realizó un estudio sobre el potencial del gas natural para reducir la pobreza energética en el sur-sureste mexicano, así como para aumentar sus posibilidades de generar, atraer y retener inversiones.
Mencionó que la pobreza energética del sur-sureste, en el fondo, es un reflejo de las condiciones de desarrollo general de estas entidades.
“La región sur-sureste de México presenta deficiencias en múltiples indicadores que se relacionan directa o indirectamente con su competitividad, entendida como su capacidad para generar, atraer y retener talento e inversión”, agregó.
Por ejemplo, en tres entidades de la región sur-sureste (Oaxaca, Chiapas y Guerrero) más de 40% de los hogares utilizan leña como combustible para cocinar. En Oaxaca este es el principal combustible doméstico con 50.5%, mientras que el promedio nacional es 13.3%.
Asimismo, resaltó la baja penetración del gas natural en viviendas, mientras que el promedio nacional es 8.6%, hay entidades como Campeche donde el acceso a gas natural en hogares es prácticamente inexistente (0.1%), a pesar de ser el principal productor a nivel nacional.
“Desde el ángulo de inversión, a pesar del interés de empresas de diversas partes del mundo por establecerse en países como México, actualmente no existen las condiciones que permitan que estas se instalen en el sur-sureste del país. Esto es consecuencia de que esta región es menos atractiva para los inversionistas en comparación con sus contrapartes del norte y centro debido, entre otras cosas, a su limitada disponibilidad de gas natural y sus costos comparativamente más altos de energía eléctrica”, abundó.