Los presidentes de Rusia y Estados Unidos, Vladimir Putin y Donald Trump, ofrecieron una conferencia luego de su tan esperada reunión en Alaska. Se mostraron optimistas en que esta cumbre es solo el principio del fin del conflicto en Ucrania.
Aunque no dieron detalles, ambos mandatarios afirmaron que fue una reunión muy productiva en la que se alcanzaron muchos acuerdos.
Putin insistió en que se deben atacar las causas del conflicto y se dijo dispuesto a trabajar también por la seguridad de Ucrania.
«Nuestras negociaciones transcurrieron en una atmósfera constructiva y mutuamente respetuosa. Han sido tremendamente sustanciales y útiles», dijo.
Trump, por su parte, dijo que evitarán que mueran 6 mil personas a la semana. Y se comprometió a dar parte de lo ocurrido este viernes al presidente de ucraniano, Volodimir Zelensky.
“Muchos puntos se acordaron. Solo hay algunos pocos que se quedaron (sin resolver). Algunos no son significativos. Uno es probablemente el más significativo, pero tenemos una buena oportunidad de llegar a resolverlos. No hemos llegado allí, pero tenemos una buena oportunidad de lograrlo”, dijo el huésped de la Casa Blanca.
Finalmente, el presidente ruso invitó a su homólogo estadounidense a que la próxima reunión se lleve a cabo en Moscú, a lo que Trump respondió “interesante”.
Esta fue la primera visita de Putin a suelo estadounidense desde 2015, cuando se reunió con el entonces presidente Barack Obama y la primera desde que inició el conflicto entre Kiev y Moscú.