El Alto Comisionado de Naciones Unidas para los Derechos Humanos, Volker Türk, expresó su preocupación por las detenciones arbitrarias en Venezuela y el uso desproporcionado de la fuerza que alimentan el «clima de miedo» desde las elecciones presidenciales, mientras que instó al gobierno venezolano a rechazar leyes para regular ONGs y redes sociales.
“El derecho penal nunca debe utilizarse para limitar indebidamente los derechos a la libertad de expresión, de reunión pacífica y de asociación”, recordó en un comunicado.
Türk instó a la liberación inmediata de todas las personas detenidas arbitrariamente, así como a garantizar juicios justas para todos los detenidos.
Los datos de la Oficina del Alto Comisionado dan cuenta de más de 2,400 detenciones desde el 29 de julio, entre ellos hay manifestantes, defensores de derechos humanos, adolescentes, personas con discapacidad, miembros de la oposición o personas a quienes se considera relacionadas con ellos y observadores electorales acreditados por los partidos de oposición en los centros de votación.
En la mayoría de los casos documentados por esa dependencia no se ha permitido a los detenidos designar a un abogado de su elección ni tener contacto con sus familiares.
Según el comunicado, algunos de esos casos constituyen desapariciones forzadas.
«El uso desproporcionado de la fuerza por parte de los agentes encargados de hacer cumplir la ley y los ataques contra manifestantes por parte de personas armadas que apoyan al gobierno, algunos de los cuales resultaron en muertes, no deben repetirse”, dijo el Alto Comisionado.
En este sentido, enfatizó que todas las muertes en las protestas deben investigarse y que los responsables deben rendir cuentas y ser sancionadas según el debido proceso.