En un espectáculo que parece no tener fin, Shohei Ohtani volvió a dejar su huella al conectar su quinto cuadrangular en igual número de juegos, igualando un récord histórico de los Dodgers. Fue en la primera entrada cuando, con la seguridad de un veterano, castigó una curva de Chris Paddack que terminó a 134 metros del plato.
A pesar de no volver a volarse la cerca en el resto del partido, su impacto se hizo sentir hasta el último out. Rocco Baldelli, piloto de los Twins, no quiso arriesgarse: le dio base intencional cuando Ohtani representaba la carrera de la victoria. La estrategia no funcionó.
Esteury Ruiz negoció un boleto y Freddie Freeman respondió con un batazo decisivo al jardín izquierdo. Betts y Ohtani anotaron y los Dodgers sellaron la remontada por 4-3, en una jugada que demostró por qué Ohtani es un factor más allá de su bateo.
Dave Roberts coincidió con la estrategia rival, afirmando que fue correcto evitar a su estrella. “Es capaz de batear todo tipo de lanzamientos. Ha tenido una semana tremenda”, dijo el estratega angelino al finalizar el juego.
El bate encendido del japonés lo coloca en la antesala de una marca histórica: conectar jonrones en seis juegos consecutivos. En Boston, frente al icónico “Monstruo Verde”, Ohtani buscará acercarse al récord absoluto de ocho juegos seguidos con cuadrangular.