El año 2025 será recordado no solo por el bicampeonato de los Los Angeles Dodgers, sino por la actuación individual que le valió a Shohei Ohtani su cuarto premio al Atleta Masculino del Año de The Associated Press. Al igualar a LeBron James y Tiger Woods con cuatro galardones, el japonés ratificó que es el deportista más dominante de la actualidad, gracias a una temporada donde su impacto en el juego fue sencillamente monumental.
El dominio de Ohtani alcanzó su clímax en la postemporada. En el crucial Juego 4 de la Serie de Campeonato de la Liga Nacional, el astro logró quizás la mejor actuación individual en la historia del deporte: lanzó seis entradas en blanco con 10 ponches y, como bateador, conectó tres jonrones para ganar el MVP del juego. El propio Ohtani lo calificó como su «mejor partido» en una carrera llena de hazañas.
A pesar de la hazaña, Ohtani demostró ser humano en el dramático Juego 7 de la Serie Mundial contra Toronto. Subió al montículo con poco descanso y, a pesar de sus problemas de control, permitió un jonrón de tres carreras a Bo Bichette. Pero su esfuerzo, junto con el resto de los Dodgers, fue suficiente para alzar el segundo trofeo consecutivo de la Serie Mundial.
El impacto de Ohtani no solo se mide en carreras y ponches, sino en alcance global. La presencia del japonés ha sido «transformadora» para la MLB. El Juego 7 de esta Serie Mundial promedió 13.1 millones de espectadores en Japón, convirtiéndose en el partido de Serie Mundial más visto en la historia del país, y sumando 51 millones de espectadores a nivel global.
Con solo 31 años y un contrato récord de $700 millones, Ohtani ya tiene la mira puesta en 2026: «Ganar un tercer campeonato consecutivo de la Serie Mundial es una de las mayores metas». El astro, que se convirtió en padre en abril y fue el primer jugador en la historia en ganar cuatro premios MVP por votación unánime, continuará dejando que su bate y su brazo hablen, aunque con el objetivo de mejorar su inglés para «superar la brecha».
