El japonés Shohei Ohtani escribió un nuevo capítulo en su brillante carrera al debutar como lanzador de los Dodgers en el Dodger Stadium, en la victoria 6-3 sobre los Padres de San Diego. No solo subió al montículo, sino que también se presentó como primer bateador, algo inédito en la Liga Nacional desde 1953.
Ohtani permitió una carrera y dos hits en una entrada de trabajo, realizando 28 lanzamientos, algunos de ellos superando las 100 millas por hora. Esta actuación marca su regreso como pitcher luego de 21 meses de ausencia tras una segunda operación en el ligamento colateral cubital.
En la parte baja del juego, Ohtani se ponchó en su primera aparición al bate como bateador designado. Aun así, su presencia fue clave para encender la energía del equipo y del público en el Dodger Stadium.
Los Dodgers construyeron una ofensiva sólida con cinco carreras en la cuarta entrada, aprovechando errores y buenos turnos al bate, para tomar una ventaja decisiva frente a los Padres.
Con este desempeño, Ohtani se convierte en el tercer jugador desde 1900 en iniciar un partido como lanzador y también como primer bateador. El fenómeno japonés continúa revolucionando el béisbol con cada aparición.