El fabricante japonés Nissan anunció la venta de su sede en Yokohama, al sur de Tokio, por 97 mil millones de yenes ( 630 millones de dólares) a una inmobiliaria con sede en Tokio, como parte de su plan global de reestructuración.
La compañía informó que obtendrá una ganancia de 73 mil 900 millones de yenes (480 millones de dólares) con la operación, aunque seguirá ocupando el edificio bajo un contrato de arrendamiento, sin revelar el monto del alquiler.
El plan de reestructuración incluye el cierre de siete de sus 17 plantas y el recorte de 20 mil empleos, en respuesta a la caída de ventas en Estados Unidos y China.
“Los fondos obtenidos con esta operación acelerarán las iniciativas de modernización y transformación de las instalaciones”, señaló la compañía.
El anuncio se dio horas antes de la publicación de sus resultados financieros del primer semestre fiscal (abril–septiembre), en los que prevé pérdidas operativas por 30 mil millones de yenes (195 millones de dólares).
Para el ejercicio completo, que concluye en marzo de 2026, la empresa estima pérdidas por 275 mil millones de yenes (cerca de mil 790 millones de dólares).
