El presidente de Nepal designó a Sushila Karki, expresidenta del Tribunal Supremo, como primera ministra interina, convirtiéndola en la primera mujer en liderar el país del Himalaya.
Karki, de 73 años y conocida por su postura contra la corrupción, será juramentada como líder interina mientras se negocia la formación de un gobierno de transición.
El anuncio se da tras intensas manifestaciones en Katmandú que provocaron la renuncia del primer ministro Khadga Prasad Oli y dejaron al menos 51 muertos. Entre los fallecidos se encuentran manifestantes, reclusos que intentaron escapar de una cárcel en la capital y tres oficiales.
Las protestas comenzaron el lunes en Katmandú por una prohibición en redes sociales, pero derivaron en un descontento más amplio contra hijos de la élite política, conocidos como “nepo kids”, quienes presumen de estilos de vida lujosos mientras la mayoría de los jóvenes batallan para encontrar trabajo.
Manifestantes atacaron e incendiaron edificios gubernamentales, obligando al primer ministro Khadga Prasad Oli a dimitir y huir de su residencia oficial.
Mientras tanto, el Ejército tomó el control de la capital y se mantiene un toque de queda parcial.
