En un ambiente vibrante en el Kenan Memorial Stadium, el seleccionador Javier “Vasco” Aguirre planteó un esquema defensivo firme y ordenado. México logró contener a Turquía, un rival que dominó la posesión (55 %) y creó más ocasiones, pero no encontró la precisión necesaria frente al arco rival.
El único gol del encuentro llegó al filo del primer tiempo. Orbelín Pineda, con un potente remate de zurda dentro del área, aprovechó una buena asistencia de Julián Quiñones para romper el empate.
Ya en la segunda mitad, México resistió las embestidas turcas. Algunos disparos peligrosos —un cabezazo de Merih Demiral entró en juego y fue desviado por la defensa mexicana— pusieron presión, pero la zaga y Malagón estuvieron acertados.
Este triunfo amistoso nutre la moral del Tri de cara al arranque de la Copa Oro y refuerza la propuesta táctica del “Vasco” Aguirre: un equipo compacto, con capacidad para aguantar y golpear al contraataque.