La titular de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, acudió en nombre del pueblo de México y la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo, para rendir honores al Papa Francisco durante la ceremonia fúnebre en el Vaticano.
La encargada de la política interna del país destacó el legado humanista del pontífice argentino, así como su defensa a los pobres y migrantes, y su impacto como líder espiritual, reformista y amigo del pueblo mexicano.
“En representación de la presidenta Claudia Sheinbaum Pardo y del pueblo de México, acudo a esta ceremonia para dar el último adiós al Papa Francisco. Lamentamos su partida y extendemos nuestras condolencias a la comunidad católica del mundo”, expuso en la primera parte de su mensaje.
“Venimos a Ciudad del Vaticano a externar el pesar que nos deja su partida y a reconocer su gran legado reformista, progresista y visionario, hoy el pueblo católico pierde a un gran líder, el mundo pierde a un gran hombre y México a un gran amigo», concluyó.
Como parte de la delegación mexicana asistieron también el embajador de México en el Vaticano, Alberto Barranco Chavarría, y la titular de la Unidad de Asuntos Religiosos, Clara Luz Flores.