La denuncia por violencia familiar contra Luis Ángel Malagón, portero del Club América, ha encendido las alarmas en el fútbol mexicano. Presentada por su pareja en la alcaldía Coyoacán, la Fiscalía de la Ciudad de México ha iniciado una investigación y se espera que el jugador sea citado a declarar.
El caso se persigue de oficio, lo que implica que las autoridades deben investigar incluso sin una denuncia formal. Esto podría afectar la participación de Malagón en la Selección Nacional, especialmente con la proximidad de torneos importantes como la Copa Oro.
Malagón respondió a las acusaciones a través de sus redes sociales, calificándolas de «chismes y difamaciones», y aseguró tener la conciencia tranquila. Hasta el momento, ni el Club América ni la Federación Mexicana de Futbol han emitido comunicados oficiales al respecto.
La situación ha generado incertidumbre sobre su futuro en el equipo nacional. Malagón ha sido una pieza clave en el América y su posible ausencia podría tener repercusiones significativas.
Este caso pone de relieve la importancia de la conducta personal de los deportistas y cómo situaciones fuera del campo pueden impactar sus carreras profesionales. Se espera que en los próximos días se esclarezcan los hechos y se determinen las consecuencias para el jugador.