El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, informó un despliegue militar, policial y civil en todo el país, con la creación de 284 “frentes de batalla”, en respuesta al aumento de fuerzas estadounidenses en el Caribe. No precisó el número de efectivos.
“Estamos preparados para la lucha armada, si fuese necesario”, declaró desde Ciudad Caribia, acompañado del ministro de Defensa, Vladimir Padrino, y otros funcionarios. Maduro, por quien Washington ofrece una recompensa de 50 millones de dólares, afirmó que el operativo busca el “combate por la paz”.
Pese al anuncio, testigos de Reuters no reportaron un incremento visible de militares o policías. Estados Unidos sostiene que su despliegue en la región tiene fines de operaciones contra los cárteles de la droga.
