En su primera declaración pública desde que se declaró un alto el fuego con Israel, el líder supremo iraní, el ayatolá Ali Jamenei, afirmó que su país dio “una cachetada en el rostro a Estados Unidos” y advirtió que cualquier nuevo ataque será respondido.
El ayatola dijo que Washington solo se implicó en la guerra porque “sentía que si no intervenía, el régimen sionista quedaría completamente destruido”, pero que Estados Unidos “no ha obtenido ningún beneficio de esta guerra”.
Además, advirtió que operaciones como el lanzamiento de misiles contra una base estadounidense en Qatar el lunes, pueden repetirse en el futuro, ya que la República Islámica tiene “acceso a centros clave de Estados Unidos en la región y puede tomar medidas cuando lo considere necesario”. “Si se produce alguna agresión, el enemigo pagará, sin duda, un alto precio”.
