Jennifer Hermoso testificó este lunes en el juicio contra Luis Rubiales, ex presidente de la Real Federación Española de Fútbol, por el beso no consentido que le dio durante la celebración del Mundial Femenino 2023. La futbolista aseguró que nunca dio permiso y que se sintió vulnerada en un momento que vio el mundo entero. “Me besó mi jefe y eso no debe ocurrir”, declaró.
El caso ha generado gran controversia, y la fiscalía pide una condena de dos años y medio de prisión para Rubiales por agresión sexual y coacción. La delantera de 34 años también mencionó que recibió presiones para firmar una declaración que lo exculpara, algo a lo que se negó rotundamente.
El escándalo no solo eclipsó el triunfo histórico de España, sino que también impulsó una huelga de jugadoras y cambios profundos en la federación. Se destituyó a la mano derecha de Rubiales y, por primera vez, una mujer asumió el cargo de entrenadora de la selección.
Este juicio, que inició a las 10:00 horas, contó con los testimonios de varias compañeras de Hermoso, incluyendo a la ganadora del Balón de Oro, Alexia Putellas. Rubiales declarará el 12 de febrero, en un proceso que podría marcar un antes y un después en el fútbol español.
