Una jueza federal impidió temporalmente que la administración Trump vuelva a detener a Kilmar Ábrego García, horas después de ordenar su liberación de un centro de detención de inmigrantes en Pensilvania.
La magistrada Paula Xinis, del distrito de Maryland, emitió una orden de restricción temporal que prohíbe su arresto hasta que se celebre una audiencia sobre el caso.
Ábrego García, de 30 años, se ha convertido en un símbolo de las críticas contra las políticas migratorias de Trump.
En marzo fue deportado irregularmente a El Salvador, pese a que desde 2019 contaba con una resolución de un juez de inmigración que prohibía su expulsión por riesgo a su vida.
Al llegar al país, las autoridades salvadoreñas lo recluyeron en el CECOT, la prisión de máxima seguridad del Gobierno de Nayib Bukele.
Después de una disputa legal, las autoridades salvadoreñas devolvieron a Ábrego a Estados Unidos en junio para que enfrentara cargos federales por tráfico de personas. Ábrego García y sus abogados rechazan dichas acusaciones.
Desde entonces permanecía bajo custodia del Servicio de Inmigración y Control de Aduanas (ICE). La dependencia incluso evaluaba deportar a Kilmar a un tercer país, ante la imposibilidad de enviarlo nuevamente a El Salvador.
El jueves, Xinis ordenó su liberación inmediata al considerar que ICE lo mantenía detenido sin autoridad legal y sin contar con una orden válida de deportación.
El salvadoreño compareció este viernes ante una oficina de ICE en Maryland, donde su defensa pidió impedir una nueva detención y la jueza concedió la solicitud.
Aunque ya no está bajo custodia migratoria, Ábrego continúa sujeto a libertad provisional dictada por un juez de Tennessee mientras avanza su proceso penal. Vive en Maryland, donde reside con su esposa e hijos estadounidenses.
