La edición 2025 de la Vuelta a España se desarrolla en medio de un ambiente cargado de protestas sociales. El equipo Israel Premier-Tech, protagonista involuntario de los disturbios, decidió retirar la palabra Israel de su uniforme para evitar incidentes durante la etapa 14, que se disputó entre Avilés y La Farrapona.
La medida responde a las manifestaciones que en los últimos días han interrumpido la competición, con centenares de personas exigiendo justicia por la situación en Gaza. Sylvan Adams, propietario de la escuadra, señaló que la decisión busca priorizar la seguridad de los corredores y criticó con dureza la hostilidad experimentada en las primeras jornadas.
Adams aseguró que no se modificará el nombre oficial del equipo en el registro de la UCI, aunque reconoció que en lugares como el País Vasco encontraron una resistencia social inesperada por su magnitud.
No es la primera vez que el Israel Premier-Tech enfrenta este tipo de dilemas. La temporada anterior ya habían optado por retirar referencias directas al país de su autobús, en un claro precedente de lo que ocurre ahora en la ronda española.
Lo sucedido confirma que el ciclismo, como escaparate global, no queda ajeno a los debates políticos y puede convertirse en punto de encuentro entre deporte y protesta social.