Un incendio forestal quemó alrededor de 80 hectáreas y amenazó viviendas en un suburbio exclusivo de Los Ángeles, California, obligando al Departamento de Bomberos de Los Ángeles a emitir una orden de evacuación obligatoria para miles de residentes de una gran zona desde las colinas de Topanga Canyon hasta la costa.
La situación se agrava por las condiciones climáticas extremas que se registran en la región. El Servicio Meteorológico Nacional ha emitido una alerta por fuertes vientos, lo que aumenta significativamente el riesgo de propagación de las llamas.
La sequía que afecta a California desde hace varios años ha dejado la vegetación extremadamente seca, convirtiéndola en combustible ideal para los incendios forestales.
Antes de que comenzara el incendio, el Servicio Meteorológico Nacional había emitido su alerta más alta por condiciones extremas de incendio para gran parte del condado de Los Ángeles desde el martes hasta el jueves, pronosticando ráfagas de viento de 50 a 80 mph con vientos aislados de 80 a 100 mph en las montañas y colinas. Esto combinado con baja humedad y vegetación seca debido a la falta de lluvia.
