Tres personas han muerto en España debido a una de las peores temporadas de incendios forestales en 20 años.
La víctima, según el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, es “un bombero voluntario”, de 37 años, que murió en Castilla y León, al noroeste del país.
«Nuestro cariño y acompañamiento a su familia y amigos en este momento insoportable», escribió el jefe del Ejecutivo.
La emergencia ha obligado a la evacuación de miles de personas y llevó al país a solicitar ayuda a sus aliados europeos.
En tanto, 10 personas han sido detenidas desde el 1 de junio, según la Policía, que investiga a otras 38 por provocar incendios forestales de forma deliberada.