El gobernador de Michoacán, Alfredo Ramírez Bedolla, expresó nuevamente sus condolencias por el asesinato del alcalde de Uruapan, Carlos Manzo, y afirmó que el crimen lo hizo revivir el homicidio de su propio padre, ocurrido en la misma ciudad cuando él tenía 10 años.
Durante la presentación del “Plan Michoacán por la Paz y la Justicia”, Ramírez Bedolla recordó que su madre sacó adelante a su familia tras aquel hecho y se solidarizó con Grecia Quiroz, viuda del alcalde.
“Entiendo más de lo que creen la huella de la violencia y lo difícil que es quedar huérfano a los 10 años. El asesinato de Carlos me llevó a mi pasado, un pasado que muchos compartimos”, señaló.
El mandatario hizo estas declaraciones en medio de críticas por la represión a manifestantes que exigían mayor seguridad y tras comentarios suyos considerados irónicos hacia la estrategia del alcalde asesinado.

Ramírez Bedolla sostuvo que el nuevo plan busca atender las causas de la violencia y combatir la impunidad, reconociendo que las protestas recientes son un “grito legítimo de dolor”.
“Tenemos que poner fin a esta violencia, pero no con más violencia. Somos necios en atender las causas”, afirmó.
El gobernador reconoció que la estrategia de seguridad de Carlos Manzo estaba dando resultados y prometió apoyo a su familia.
“Carlos y yo trabajamos juntos por Uruapan como nadie lo había hecho. Hoy reitero mi compromiso con Michoacán”, concluyó.













