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Italia ha decidido mirar al pasado glorioso para reconstruir su futuro: Gennaro Gattuso ha sido designado como el nuevo entrenador de la selección nacional. La FIGC lo hizo oficial este domingo y adelantó que su presentación se llevará a cabo el próximo jueves 19 de junio en Roma. Su principal desafío será enderezar el rumbo rumbo al Mundial de 2026.

Tras la dolorosa goleada sufrida ante Noruega, la FIGC optó por terminar el vínculo con Luciano Spalletti. La búsqueda de su reemplazo no fue fácil: Ranieri y Pioli rechazaron la propuesta, y luego se consideraron figuras del Mundial 2006. Entre ellas, Gattuso fue quien asumió la responsabilidad de liderar el nuevo proceso.

El reto no es menor: Italia tiene que ganar sus seis encuentros restantes en la fase clasificatoria y buscar una diferencia de goles significativa. Si no logra terminar en la cima del grupo, deberá conformarse con el segundo puesto y enfrentar la siempre peligrosa repesca.

El primer examen para Gattuso llegará el 5 de septiembre frente a Estonia. Su estilo enérgico y su cercanía con la camiseta italiana lo convierten en una figura idónea para motivar a un equipo que ha perdido confianza en los últimos años.

«Con Gattuso llega un líder nato. Es un hombre que encarna el ADN de Italia. Su presencia en el banquillo puede significar el principio de un nuevo ciclo ganador», afirmó el presidente Gravina, en lo que representa una apuesta emocional y deportiva para cambiar la historia reciente del fútbol italiano.