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El grupo militar palestino Hamás anunció que dejaría de liberar rehenes israelíes hasta nuevo aviso por supuestas violaciones de Israel al acuerdo de alto al fuego.

Abu Ubaida, portavoz del ala militar de Hamás, afirmó que desde que entró en vigor el alto al fuego el 19 de enero, Israel había retrasado el regreso al norte de Gaza de los palestinos desplazados, había atacado a los gazatíes con bombardeos militares y disparos y había impedido la entrada en el territorio de material de ayuda.

Ubaida dijo que Hamás no liberaría a más rehenes hasta que Israel “cumpla y compense por las últimas semanas”.

En respuesta, el ministro de Defensa israelí, Israel Katz, afirmó que Hamás había violado el acuerdo de alto al fuego con su anuncio y dijo que había dado instrucciones al ejército para que se preparara al máximo nivel en Gaza y defendiera a las comunidades israelíes.

Los negociadores de Hamás dijeron que las garantías de Estados Unidos para el alto al fuego ya no existían dado el plan de Donald Trump de desplazar a los palestinos de la Franja de Gaza, y los mediadores pospusieron las conversaciones hasta que se reciba una indicación clara de la intención de Washington de continuar con el acuerdo por fases.

El inesperado anuncio se conoce cuando hay crecientes dudas sobre un alto al fuego ya de por sí frágil, mientras las familias de los rehenes israelíes instan al gobierno a cumplir el acuerdo y los habitantes de Gaza intentan empezar a reconstruir sus vidas en el destrozado enclave.