Durante la audiencia general en la plaza de San Pedro, el papa León XIV recordó “a los niños de Ucrania, Gaza y de otras regiones golpeadas por la guerra” e instó a los fieles a incluirlos en sus oraciones y proyectos humanitarios.
El pontífice, de origen estadounidense y peruano, aprovechó el Día Nacional de los Niños Polacos Víctimas de la Guerra para destacar el sufrimiento infantil en los conflictos armados y la contribución histórica de los menores polacos a la reconstrucción tras la Segunda Guerra Mundial.
En sus saludos a los peregrinos, animó a los fieles de Tierra Santa a transformar su dolor en oración confiada y exhortó a los de habla hispana a “dar voz a los sufrimientos de la humanidad” como fuente de esperanza.
En su catequesis, León XIV pidió no ceder al cinismo y recordó que “un grito nunca es inútil si nace del amor”, llamando a expresar el dolor como forma de resistencia y fe en que “otro mundo es posible”.
Pese a las tormentas que azotaron Roma, miles de feligreses asistieron al encuentro, donde el papa recorrió la plaza en el papamóvil cubierto para saludar y bendecir a los niños presentes.
