Tadej Pogacar volvió a demostrar que es el hombre a vencer en el próximo Tour de Francia al conquistar con autoridad el Critérium del Dauphiné 2025. El esloveno, quien regresó a la competición tras sus victorias en las clásicas primaverales, se llevó tres etapas y la clasificación general con una ventaja que parece propia de una gran vuelta. Su rendimiento fue tan sólido que nunca estuvo en peligro el maillot amarillo, ni siquiera ante los ataques en la montaña.
En la última jornada, disputada en el exigente Mont-Cenis, el protagonismo fue para el francés Lenny Martinez, que ganó en solitario tras descolgar a Enric Mas y resistir los intentos de los favoritos. Sin embargo, Pogacar manejó con soltura los ataques finales de Jonas Vingegaard y Remco Evenepoel, quienes apenas lograron recortarle segundos.
Con su triunfo en el Dauphiné, Pogacar superó por 59 segundos a Vingegaard, doble campeón del Tour. Remco Evenepoel terminó a 4:41 y Carlos Rodríguez a casi nueve minutos. El alemán Florian Lipowitz, una revelación, cerró el podio a 2:38 del esloveno, quien celebró con mesura pero confianza de cara a la Grande Boucle.
“Fue una semana perfecta. Estamos listos para preparar el Tour”, declaró Pogacar, cuya superioridad en cada etapa dejó claro que su forma es envidiable. Incluso Vingegaard, su gran rival, reconoció que el esloveno fue el más fuerte y confía en mejorar su rendimiento en julio.
Con el regreso próximo de sus escuderos Joao Almeida y Adam Yates, Pogacar se encamina a un Tour donde buscará recuperar la corona. El panorama es prometedor para el UAE Team Emirates, que ve en su líder una fuerza dominante capaz de marcar una nueva era en el ciclismo mundial.