El cierre parcial del gobierno federal de Estados Unidos que cumple 35 días, está a punto de convertirse en el más prolongado de la historia. Si eso sucede coincidirá con el primer aniversario de la reelección de Donald Trump.
Se trata del cuarto cierre gubernamental durante la gestión del republicano, quien ya enfrentó tres entre 2017 y 2020, incluido el anterior récord de diciembre de 2018 a enero de 2019. Aquel episodio se originó por el desacuerdo entre republicanos y demócratas sobre la financiación de 5 mil 700 millones de dólares para el muro fronterizo con México.
La clausura dejó a 800 mil empleados federales sin salario durante más de un mes.
Ese cierre terminó el 25 de enero de 2019 tras un acuerdo temporal sin incluir los fondos para el muro, aunque Trump posteriormente declaró una emergencia nacional para financiar la obra.
El mandatario también enfrentó otros dos cierres en 2018: uno de tres días en enero, debido a las disputas sobre ayudas a los “dreamers”, y otro de apenas unas horas en febrero, provocado por la oposición del senador Rand Paul al gasto público.
Desde 1980, Estados Unidos ha atravesado más de una docena de cierres parciales, resultado de crisis presupuestarias entre el Congreso y la Casa Blanca.
