El Ejército de Estados Unidos atacó la noche del martes una embarcación supuestamente relacionada con el narcotráfico frente a la costa pacífica de Colombia, en el marco de su estrategia para frenar el tráfico de drogas hacia el país.
Pete Hegseth, secretario del Departamento de Guerra, afirmó que dos personas, presuntos narcoterroristas, murieron durante el ataque. Agregó que “ninguna fuerza estadounidense resultó herida” y advirtió que los “narcoterroristas” no encontrarán puerto seguro en el hemisferio.
En los últimos meses, bajo las órdenes del presidente Donald Trump, EE. UU. ha atacado al menos seis embarcaciones en el Caribe, con un saldo de 27 muertos.
Estas acciones se realizan en el marco de lo que la administración describe como una lucha contra la amenaza “narcoterrorista” vinculada a Venezuela y a Nicolás Maduro.
La operación se acompaña de un aumento de la presencia militar estadounidense en la región, incluyendo destructores, aviones F-35, un submarino nuclear y unos 6 mil 500 soldados.