Pam Bondi, fiscal general de Estados Unidos, despidió a más de 20 empleados del Departamento de Justica, quienes trabajaron en casos relacionados con el asalto al Capitolio del 6 de enero de 2021 y el manejo de documentos clasificados por parte de Donald Trump.
Los despidos incluyeron abogados, personal de apoyo y alguaciles federales, según informó un funcionario del departamento de Justicia al medio Axios, que consideró estas acciones como una “purga masiva”.
The New York Times, por su parte, informó este sábado que entre los despedidos se encontraban dos fiscales, que trabajaron a su vez con el fiscal especial Jack Smith, además de otros 7 de su personal de apoyo.