El Cruz Azul Femenil le dice adiós a la inestabilidad de sedes en la capital y se muda temporalmente al Estadio Centenario de Cuernavaca, Morelos, por los próximos seis meses. La directiva oficializó el movimiento, apuntando a asegurar una mejor condición de localía para el plantel y, de paso, acercar el equipo a la fiel afición celeste residente en el estado vecino.
La necesidad de un estadio fijo surge como respuesta directa al desempeño de la temporada anterior. En su campaña más sólida, que las llevó hasta las semifinales del torneo y un séptimo lugar con 28 puntos, el equipo alternó entre el Estadio Ciudad de los Deportes y La Noria. Aunque el rendimiento fue notable (exigiendo incluso al campeón Tigres), la logística de las sedes no fue la óptima, llevando a la directiva a buscar una alternativa permanente.
La elección de Cuernavaca como «casa» para este semestre es una apuesta por la concentración y la estabilidad. Los directivos esperan que la nueva sede ofrezca al equipo las condiciones necesarias para mantener e incluso superar el alto nivel competitivo mostrado recientemente, aprovechando la infraestructura del Estadio Centenario.
Este cambio, sin embargo, se encuentra en periodo de prueba. La dirigencia ha estipulado que la permanencia en Morelos no es definitiva. Al concluir el presente torneo, se realizará un análisis completo de la experiencia para decidir si el equipo femenil de Cruz Azul adoptará el Estadio Centenario de forma permanente o si emprenderá el camino de vuelta a la Ciudad de México.








