La Corte Suprema de Estados Unidos autorizó al presidente Donald Trump retomar su plan para desmantelar el Departamento de Educación, incluyendo el despido de cerca de mil 400 empleados, una de sus principales promesas de campaña.
La decisión revoca una orden del juez federal, Myong Joun, en Boston, quien había suspendido los despidos y cuestionado la legalidad de todo el plan al considerar que los recortes “probablemente paralizarán al Departamento”.
El fallo, aprobado por mayoría conservadora, no incluyó una explicación pero provocó una dura crítica por parte de la jueza Sonia Sotomayor. En un escrito conjunto con las juezas Ketanji Brown Jackson y Elena Kagan, acusó a la mayoría de permitir una acción “legalmente cuestionable”. “Es deber del Poder Judicial controlar la ilegalidad, no acelerarla”, escribió.
Con esta decisión, el gobierno de Trump puede continuar con sus esfuerzos por reestructurar el aparato federal, una línea que ha sido reforzada por decisiones judiciales previas que ya le permitieron avanzar con recortes a las subvenciones para formación docente y la reducción general de la plantilla gubernamental.
Mientras tanto, más de 20 estados demandaron al Gobierno Federal por el congelamiento de miles de millones de dólares en fondos destinados a cuidados extraescolares y programas de verano, agravando la tensión en el ámbito educativo.
