La Corte Suprema de Estados Unidos frenó por tiempo indefinido la ley que impulsó el gobernador de Texas, Greg Abbott, y que permite detener, encarcelar y expulsar a las personas que por sus rasgos no parezcan ciudadanos norteamericanos.
El gobierno texano tenía previsto que la ley entrará en vigor este lunes 17 de marzo, pero la Corte Suprema determinó que permanezca suspendida indefinidamente, mientras se analizan los alegatos del gobierno de Joe Biden, el cual impugnó el estatuto.
“Se ordena que la suspensión emitida el 4 de marzo, 20-24, sea por este medio extendida pendiente de una orden ulterior del firmante de la Corte”, resolvió el juez Samuel Alito.
La Ley SB4 fue aprobada a finales de 2023; hace unas semanas el Departamento de Justicia solicitó a la Corte analizar el asunto.
Texas se ha opuesto a decisiones de la Corte y no las ha respetado. Un ejemplo de esto ocurrió en enero pasado, cuando a pesar de la resolución que permite al gobierno de Joe Biden que agentes de la Patrulla Fronteriza desmantelen el alambrado de púas colocado por el gobierno texano en la frontera con México, Greg Abbott ha impedido el acceso a las autoridades.
El texano acusó al presidente Biden de enviar a sus abogados a los tribunales federales en vez de procesar a los migrantes por entrar de manera ilegal a territorio norteamericano.
“Los estados no deberían quedar a merced de un presidente sin ley que no hace nada para detener amenazas externas como los cárteles que trafican con millones de inmigrantes ilegales a través de la frontera”, expresó el texano.