Lejos de los rumores de tensiones internas, Sergio Pérez habló con claridad en su presentación como nuevo piloto de Cadillac para 2026: su salida de Red Bull fue con respeto y sin resentimientos. “Lo di todo hasta la última vuelta”, afirmó, dejando atrás especulaciones de conflicto con la escudería.
Checo fue parte de una era dorada en Red Bull, logrando cinco victorias, múltiples podios y consolidándose como subcampeón del mundo. Su ciclo con el equipo terminó, pero el legado permanece.
Ahora, Cadillac le abre las puertas para liderar su ambicioso ingreso a la Fórmula 1. La marca estadounidense, junto a General Motors, apostó por el mexicano como pilar del nuevo proyecto.
El contrato abarca al menos dos temporadas, con opción a extenderse. Para Checo, es la oportunidad de comenzar desde cero, pero con una base de experiencia invaluable.
La madurez de Pérez al salir de Red Bull fue destacada por los medios internacionales. Su enfoque profesional y discurso conciliador marcaron una diferencia en un deporte donde las rupturas suelen ser tensas.
