Saltar al contenido principal

Este jueves la candidata demócrata a la presidencia de Estados Unidos, Kamala Harris, estuvo en Arizona, donde advirtió que de regresar Donald Trump a la Casa Blanca reducirá todos los programas de atención médica, además de que prohibirá el aborto en todo el país. En tanto, el republicano estuvo en Nevada, donde reiteró que el 5 de noviembre marcaría el “día de la liberación” de la nación, reafirmando así su retórica antiinmigrante.

En un mitin en Phoenix, donde estuvo acompañada por “Los Tigres del Norte”, Harris afirmó que “Donald Trump todavía quiere deshacerse de la Ley de Atención Médica Asequible, también conocida como Obamacare”. 

La Ley de Atención Médica Asequible de 2010 brinda cobertura a aproximadamente 40 millones de estadounidenses como parte del mosaico de programas de seguro médico del país. 

La ley, que en 2010 supuso un lastre político para los demócratas cuando se convirtió en ley, ahora goza de una amplia aceptación entre el público.

Harris también mencionó los comentarios de Trump sobre las mujeres en un mitin en Wisconsin el miércoles: “Les guste o no a las mujeres, tengo que protegerlas. Las voy a proteger de los inmigrantes que llegan. Las voy a proteger de los países extranjeros que quieren atacarnos con misiles y muchas otras cosas”, dijo.

En su mitin, Harris respondió: “Esta no es la primera vez que nos dice quién es. No cree que las mujeres deban tener la capacidad y la autoridad para tomar decisiones sobre sus propios cuerpos”.

Por su parte, el candidato republicano, Donald Trump utilizó una retórica antiinmigratoria para cortejar a los votantes durante un mitin en Nevada. 

Trump dijo a sus partidarios que Estados Unidos es “un país ocupado” y prometió a los votantes que el 5 de noviembre marcaría el “día de la liberación” de la nación.

“A través de nuestra frontera abierta, Kamala Harris también está ayudando activamente a los peores traficantes de personas, contrabandistas de niños, traficantes de drogas y redes criminales sedientas de sangre del planeta. No hay nadie peor que ella”, destacó.

El candidato republicano también mencionó la historia de Nicholas Quets, un joven veterano de la Infantería de Marina de Estados Unidos que fue asesinado recientemente en México, presuntamente por un cártel mexicano. La familia de la víctima estuvo presente en el mitin y Trump los invitó a subir al escenario.

“Esta es una gran familia, una familia perfecta. Y lo que les pasó a ellos no debería pasarle a nadie”, señaló Trump.