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La cantante estadounidense Britney Spears desactivó su cuenta de Instagram, donde acumulaba más de 42 millones de seguidores, tras publicar mensajes que despertaron preocupación entre sus fans por una nueva disputa con su exmarido Kevin Federline, padre de sus dos hijos.

Al intentar acceder a su perfil (@britneyspears), la plataforma indica que la cuenta ya no está disponible. Su última publicación, difundida a mediados de octubre, respondía a fragmentos del libro de memorias de Federline, You Thought You Knew, en el que el DJ afirmaba estar preocupado por la artista y aseguraba que “se ha vuelto imposible fingir que todo va bien”.

En su mensaje, Spears rechazó la imagen de mala madre que, según dijo, su exesposo intenta proyectar. 

«La constante manipulación por parte de mi exesposo es extremadamente dolorosa y agotadora, siempre he suplicado y clamado tener una vida con mis hijos…me he sentido desmoralizada por esta situación y siempre he pedido, casi suplicado, que formen parte de mi vida», decía.

La llamada “reina del pop” recuperó su libertad en 2021, tras el fin de la tutela legal impuesta por su padre durante casi 14 años. Desde entonces, ha estado bajo los reflectores por sus publicaciones en redes sociales, donde solía compartir videos bailando y posando con libertad.