El FBI informó que Mohammed Sabry Soliman, de 45 años, planeó durante un año el ataque incendiario perpetrado contra un grupo reunido en el centro de Boulder, Colorado, con el propósito de llamar la atención sobre la situación de los rehenes israelíes en Gaza. Su blanco, según declaró, era lo que describió como un “grupo sionista”.
Testigos señalaron que Soliman gritó “¡Palestina libre!” mientras utilizaba un lanzallamas casero y cócteles Molotov contra los asistentes a una manifestación semanal.
Ocho personas resultaron heridas, algunas con quemaduras, durante el violento incidente ocurrido en la zona peatonal de Pearl Street, una de las más concurridas del centro de Boulder.
De acuerdo con una declaración jurada del FBI, el atacante confesó el crimen tras ser detenido el domingo, afirmando incluso que estaría dispuesto a repetirlo.
También declaró haber aprendido a fabricar los artefactos incendiarios mediante tutoriales en YouTube y adquirió los materiales necesarios por su cuenta.
La secretaria de Justicia, Pam Bondi, condenó el ataque y aseguró que Soliman será procesado “con todo el peso de la ley”. “Nunca toleraremos este tipo de odio”, afirmó.
El ataque tuvo lugar al inicio de la festividad judía de Shavuot, y se suma a una serie de episodios violentos en medio de la guerra entre Israel y Hamas, conflicto que ha incrementado las tensiones internacionales y los actos de antisemitismo en Estados Unidos.
