El jefe de la diplomacia estadounidense, Marco Rubio, calificó de “tiranía” que los servicios de inteligencia interior alemanes hayan designado al partido Alternativa por Alemania (AfD) como “extremista de derecha”, de tal forma que las autoridades podrían someterlo a una alta vigilancia.
“Alemania acaba de dar a su agencia de espionaje nuevos poderes para vigilar a la oposición”, expresó Rubio en la red social X.
“Eso no es democracia: es tiranía disfrazada”, agregó, a la vez que pidió a las autoridades que den marcha atrás.
Por su parte, el vicepresidente estadounidense JD Vance, acusó a Alemania de haber reconstruido el Muro de Berlín y calificó a AfD como “el partido más popular” de la nación germana.
“La AfD es el partido más representativo de la Alemania del Este. Ahora los burócratas intentan destruirlo”, escribió en X.
Los países de “Occidente derribamos juntos el Muro de Berlín. Y ha sido reconstruido, no por los soviéticos ni los rusos, sino por el establishment alemán”, agregó.
En las elecciones legislativas del 23 de febrero, Alternativa por Alemania registró un avance histórico y duplicó su anterior resultado, al reunir más de 20% de los votos, quedando en segundo lugar.
El partido, fundado en 2013, incluso superó en algunos sondeos a los democristianos de la CDU, la formación conservadora de Friedrich Merz, que será investido canciller el próximo martes 6 de mayo.
