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Después de una larga recuperación por una fractura en el pie sufrida en noviembre de 2024, Alexa Grasso regresó al octágono en UFC 315, en el Bell Centre de Montreal, Canadá. Su oponente fue la brasileña Natalia Silva, quien llegaba con una racha invicta en UFC y un total de 12 victorias consecutivas.

Grasso, ex campeona de peso mosca, buscaba reencontrarse con la victoria tras perder su título ante Valentina Shevchenko en septiembre de 2024. Sin embargo, la pelea contra Silva resultó ser un desafío mayor al esperado.

Durante los tres asaltos, Silva dominó con una estrategia efectiva, neutralizando los intentos ofensivos de Grasso. Los jueces otorgaron una decisión unánime de 30-27 a favor de la brasileña, marcando una derrota significativa para la mexicana.

Esta derrota complica las aspiraciones de Grasso de obtener una revancha contra Shevchenko, ya que su récord en UFC ahora es de 16 victorias, 1 empate y 5 derrotas. Por su parte, Silva se posiciona como una fuerte contendiente al título de peso mosca.

A pesar del revés, Grasso ha demostrado resiliencia en su carrera y seguramente buscará nuevas oportunidades para regresar a la cima de su división.