La posibilidad de alcanzar un acuerdo de paz entre Rusia y Ucrania está lejos de resolverse, un ataque del Kremlin en territorio ucraniano quitó la vida al menos a 20 personas y dejó heridas a 55 más.
De acuerdo con las autoridades ucranianas, los ataques más intensos se registraron en la ciudad de Dobropillya, en la región de Donetsk, donde al menos 11 personas perdieron la vida después de que un par de misiles balísticos estallaron cerca de ocho edificios residenciales y un centro comercial.
El presidente Volodimyr Zelensky emitió un mensaje en Telegram asegurando que, mientras un grupo de rescatistas intentaba auxiliar a las personas atrapadas entre los edificios derruidos, se produjo otro ataque.
“Este tipo de ataques demuestra que los objetivos de Rusia no han cambiado. Lanzó otro ataque dirigido deliberadamente a los rescatistas”, escribió.
En otros puntos del territorio ucraniano se produjeron otros nueve decesos y 13 heridos. Aunque el ejército ucraniano intentó repeler la ofensiva en su contra, el Ministerio de Defensa ruso informó que sus fuerzas armadas lograron contener a 31 drones.
El bombardeo se produce después de que Washington suspendió la ayuda militar y la inteligencia a Kiev para presionarla a aceptar un acuerdo de paz impulsado por Donald Trump.
Después del intento fallido del presidente Zelensky para dialogar con el presidente Trump en la Casa Blanca para lograr un acuerdo de paz con Rusia, desde Kiev se habló de retomar las negociaciones, pero el mandatario estadounidense declaró que le resultaba “más difícil, francamente, tratar con Ucrania que con Rusia”.
