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El Departamento de Justicia informó el miércoles que un antiguo ingeniero de software de Google, Linwei Ding, está siendo procesado por presuntamente sustraer tecnología de inteligencia artificial de la compañía. Se le imputan cargos por operar en colaboración con dos firmas chinas de forma clandestina.

Ding, de nacionalidad china, fue detenido en Newark, California, enfrentándose a cuatro cargos por el hurto de secretos industriales, cada uno susceptible de una pena máxima de diez años de reclusión.

La imputación fue divulgada en un evento de la Asociación de Abogados de Estados Unidos en San Francisco por el Fiscal General Merrick Garland. Este último, junto a otros altos funcionarios, ha resaltado en repetidas ocasiones el peligro que supone el espionaje económico por parte de China y los riesgos para la seguridad nacional derivados del progreso en la inteligencia artificial.

Christopher Wray, director del FBI, expresó que este caso es una muestra de la extensión a la que están dispuestas a llegar las entidades chinas para apropiarse de innovaciones americanas. Advirtió sobre las graves consecuencias económicas y de seguridad nacional que podría acarrear el robo de tecnología estadounidense.

Recientemente, el Departamento de Justicia ha alertado sobre cómo los enemigos extranjeros podrían explotar la inteligencia artificial para perjudicar a Estados Unidos. La Fiscal General Adjunta, Lisa Monaco, indicó que la IA sería una de las principales preocupaciones de la Fuerza de Ataque de Tecnología Disruptiva.

Según la acusación presentada en el Distrito Norte de California, Ding, contratado por Google en 2019 con acceso a datos confidenciales sobre centros de supercomputación, comenzó a transferir cientos de archivos a una cuenta personal de Google Cloud hace dos años. Tras iniciar el hurto, fue nombrado director de tecnología en una start-up china que enfatiza en el uso de la IA.

Además, Ding fundó y lideró otra compañía en China, con el objetivo de desarrollar «grandes modelos de IA potenciados por chips de supercomputación». Se acusa a Ding de no haber revelado sus actividades externas a Google, quien dimitió el 26 de diciembre. Google descubrió su doble juego tres días después en una conferencia de inversores en Beijing y mediante la revisión de registros de acceso, revelando la colaboración de otro empleado en encubrir sus viajes a China.

Con información de AP.