Rubén Castillo Colín, alias “El Barney” fue detenido por policías de la Fiscalía General de Justicia del Estado de México (FGJEM), cuando tenía privados de la libertad a dos menores y una persona adulta, de quienes abusó sexualmente en diversas ocasiones; hoy en día tiene una condena de 162 años y seis meses de prisión.
La dependencia detalló que de acuerdo con los hechos, el 14 de septiembre de 2024, las víctimas menores de edad fueron llevadas por una mujer identificada como Michelle «N» al domicilio de Rubén Castillo Colín, ubicado en la delegación de San Cristóbal Huichochitlán, en el municipio de Toluca.
En dicho lugar, el ahora sentenciado amenazó a las menores de edad para que no se fueran de la casa, ya que si lo hacían “mandaría descuartizar a su familia”, o las privaría de la vida.
A partir de esa fecha, Rubén Castillo Colín, también haciendo uso de la violencia física, obligó a las víctimas a realizar actividades en su domicilio como barrer trapear, cocinar e ir por la comida, sin permitirles salir solas, pues las hacía acompañar y vigilar de diversas personas ya identificadas. Además, les mostró fotos de sus familiares, indicándoles que, si en algún momento intentaban escapar del domicilio, les haría daño.
En fecha 1 de octubre de 2024, las víctimas empezaron a ser abusadas sexualmente por parte de “El Barney”, situaciones que se repitieron el 4 de octubre del mismo año.
El 15 de octubre de 2024, Rubén Castillo Colin acudió al domicilio de la madre de una de las víctimas para exigirle un millón de pesos a cambio de su libertad, al tiempo de ostentarse como parte de un grupo delincuencial con orígenes en Jalisco, a fin de intimidarla para que no denunciara.
Las agresiones de índole sexual continuaron en contra de las víctimas secuestradas. Sin embargo, cuando intentó abusar sexualmente de otra víctima, ésta logró defenderse y huir de la casa y pedir auxilio a Policías de Investigación, quienes, al conocer los hechos, acudieron al domicilio donde detuvieron al ahora sentenciado y rescataron a las víctimas menores de edad.
Una vez aprehendido fue ingresado al Centro Penitenciario y de Reinserción Social de la zona a disposición de la autoridad judicial, quien, tras proceso legal, determinó la sentencia antes mencionada, una multa de 1 millón 954 mil 960 pesos y la reparación del daño por 325 mil 710 pesos.






