Saltar al contenido principal
Publicidad

A poco más de dos semanas de ser coronada Miss Universo 2025, Fátima Bosch regresó a México sin participar en actos públicos ni recibir ovaciones. La tabasqueña llegó al Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México intentando pasar desapercibida, vestida con sudadera, gorra y gafas oscuras.

Bosch, coronada el 21 de noviembre y convertida en la cuarta mexicana en obtener el título, enfrenta cuestionamientos tras la entrevista que concedió a Telemundo. Allí fue interrogada sobre la denuncia penal presentada por Nawat Itsaragrisil, director de Miss Universo Taiwán.

Aunque días antes había anunciado con entusiasmo su regreso al país, evitó informar detalles de su arribo. La prensa logró captar su llegada, ante lo cual mostró sorpresa y trató de esquivar a los reporteros. 

Al no poder evadir a los medios, Bosch aclaró que su visita no correspondía a una recepción oficial: “No es mi bienvenida; tenemos un evento y se supone que veníamos de incógnito”.

También expresó sentirse feliz, orgullosa y con mucha responsabilidad por su triunfo.

Sin embargo, cuando reporteros le preguntaron sobre las controversias que han rodeado su coronación, la mexicana respondió únicamente: “No tengo nada que decir del tema”.

La polémica en torno a Bosch se reavivó recientemente, después de que abandonara una entrevista en vivo y cancelara su gira de medios por Telemundo.

Las críticas se centran en los señalamientos sobre su coronación, la investigación contra el empresario Raúl Rocha, copropietario del certamen, y la supuesta demanda de Itsaragrisil.